Ante la situación crítica que enfrenta el Asilo Quietud en colonia Campestre, en donde los abuelitos sufrían la falta de insumos básicos, el Gobierno de Río Bravo aporta su granito de arena para mitigar esta situación.
En consecuencia, por instrucciones del alcalde Joel Eduardo Yáñez Villegas, en días pasados se hizo entrega de una aportación económica para las necesidades más apremiantes de la comunidad de adultos mayores que ahí viven sus años dorados.
Por medio de los regidores Erik Báez y Adrián Becerril Candanoza, así como del secretario del Ayuntamiento, Roberto Flores Peña, se hizo la entrega de un donativo a esa institución que cuida a adultos mayores, muchos de ellos sin familia y sin hogar propio.
Fue mediante Cruz Roja Río Bravo que encabeza la señora Noelia Cantú de Millán, que se hizo llegar a la administradora del asilo, María Cristina Juárez Garay.
En solidaridad con los abuelitos más desprotegidos de Río Bravo, la transformación de Río Bravo avanza.
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